Desde sus inicios, el Centro de Arte y Comunicación (CAYC) liderado por el gestor, artista y empresario Jorge Glusberg se propuso como un espacio interdisciplinario que pudiera generar un movimiento de arte experimental. Para ello, la conformación de redes de colaboración entre artistas y críticos locales e internacionales fue fundamental. Las exposiciones hicieron visibles esos intercambios, en los que la presentación de panoramas de tendencias o artistas individuales era una oportunidad para conocer las novedades del arte contemporáneo internacional; o bien de dar a conocer artistas argentinos y latinoamericanos en la escena mundial.
En la III Bienal de Arte Coltejer (Medellín, mayo de 1972), el CAYC presentó tres muestras: Arte de Sistemas, Arte de Sistemas en Argentina, y Hacia un perfil del arte latinoamericano. Si bien la primera se presenta como itinerancia de la realizada en 1971 (incluyendo artistas internacionales), el texto firmado por Glusberg para el catálogo de la bienal colombiana establece que la categoría “arte de sistemas” pasó a tener una connotación distinta, polifacética y asociada a una eventual identidad de la región latinoamericana. Reflejo de esa década cuando la totalidad de los países del Cono Sur sufría bajo las dictaduras militares, el énfasis en “el perfil” político era oportuno. Fue a través del desplazamiento del término —a lo largo de los setenta y yendo desde un proceso de asimilación hacia otro de distinción— donde el CAYC forjó su estrategia de visibilidad internacional.
Aunque lleva distinto título, esta gacetilla anuncia la inauguración de una nueva edición de Hacia un perfil del arte latinoamericano, en septiembre de 1975 en la lnternational Exhibition at the Vleeshal de Middelburg, Países Bajos También se presentó en la École Cantonale des Beaux-Arts et d'Art Appliqué (Lausana, Suiza) en esas mismas fechas [GT-546 (doc. no. 1476857)]. Posteriormente se mostró en el Salón de la Independencia (Quito, Ecuador, mayo de 1972); en Buenos Aires (junio de 1972); en el Encuentro Internacional de Arte de Pamplona (junio de 1972), así como en la galería Amadis de Madrid (febrero de 1973), en el Dudley Peter Allen Memorial Art (Ohio, marzo de 1974); en la Hochshule für Bildende Künste [Escuela Superior de Artes Visuales] de Hamburgo; (julio de 1974), además de Agora Studio (Maastricht, en Holanda, octubre de 1974).
Hacia un perfil… exhibió obras con las que los artistas argentinos e internacionales reflexionaron sobre la situación política común a estos países. La muestra presentó tanto una perspectiva del arte como ideología propuesta desde del Grupo de los Trece en un sucinto panorama del arte contemporáneo de la región. El arte de sistemas, para CAYC, ya no solo refiere arte procesual internacional, sino que el rasgo político añadido por muchas producciones le otorgaba una identidad propia, asociándolo a lo regional. En la presentación de la muestra, Glusberg señala: “No existe un arte de los países latinoamericanos, pero sí una problemática propia, consecuente con su situación revolucionaria” [GT-133 (doc. no. 1476312)].
Tanto la capacidad de reproducción propia de la técnica heliográfica como el bajo costo de los impresos, posibilitó una circulación ampliada de las imágenes y su exhibición en diversas sedes de manera simultánea. Los artistas invitados, tanto argentinos como extranjeros, variaron según la sede.